viernes, 31 de enero de 2014

LA DESESPERACIÓN DE LA BELLEZA



"Cuando el niño era niño no sabía que era niño,
para él todo estaba animado
y todas las almas eran una.
Cuando el niño era niño no tenía opinión sobre nada,
no tenía ninguna costumbre...",
 en El cielo sobre Berlín





El hombre en el desierto
encuentra una flor existiendo,
un río alejado de los autos
es el olvido
de la velocidad del asfalto.

¿Adónde están 
esos ojos de niño
que veían ángeles?

Los recuerdos galopan
hacia el cementerio del final de la calle,
en la raíz del oxidado portón
una fruta cae
rueda por la vereda
un gato la mira
temeroso, hambriento, curioso
la come 
y con el último gajo se convierte
en una mano de pies
de un llavero colgando,
entonces no hay dolor
porque todo es imaginación
y en su reino
no hay lugar para las heridas.

¿Adónde están 
esos ojos de niño
que veían ángeles?


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