

El 17 de Octubre de 1945 las patas sucias del pueblo, limpiaban el agua de las fuentes de Plaza de Mayo. Horrorizada, la oligarquía argentina, la misma que 31 años después iba a apoyar el terrorismo de estado de Videla, Massera y compañía; solamente atinaba a ver desde sus balcones de la avenida Callao.
Porque en la actualidad el alma del General vive entre nosotros, porque Menem lo hizo y alzó su bandera lo más alto que pudo para hundirnos, porque el Partido Justicialista nos une ante la dominación capitalista, desde este humilde y mordaz espacio; brindamos por los Soldados de Perón.
Como lo más probable sea que si Juan Domingo se levantara de su tumba ahí en San Vicente, (manco y todo), se pusiera en un muñon una motosierra y una ametralladora a repetición en el otro y fusilara en turnos de cinco minutos a Cristina, Lavagna, todos los Rodríguez Saa, todos los Menem y a cualquiera que actualmente este afiliado al Partido Justicialista; nos quedamos para beneplácito nuestro con la inapelable y gloriosa influencia del primer trabajador, en el justicialista rock nacional.