martes, 30 de junio de 2009

Ensayo






La revista Question, publicación académica de la facultad de periodismo y comunicación social de la Universidad Nacional de La Plata, publicó mi ensayo titulado La gestión de la democracia. Un país convertido en una empresa ¿Nueva fase del Capitalismo?
Los invito a leerlo cliqueando sobre el título.






domingo, 28 de junio de 2009

Abstracto: Complejo

Clásicas firmes y sencillas, modernas células se mueren día a día conmigo, bailando energizadas por segundos que nos inventaron los amos del reloj, quizás sea todo una mentira, ojalá como la de los murciélagos esos con poder de invisibilidad que se me meten en la oreja y me quieren robar las ideas, por suerte siempre llevo conmigo la petaca de mi tatatatatatara abuelo, fundador vikingo que decidió no matar más focas y se puso un puesto de revistas subterráneas en el medio de Alaska, al lado de una antena vieja, oxidada, de esas que la colorada Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas plantó para comunicarse con Dios, mentira, mentira fue lo que les dijo a sus súbditos y solamente quiso mandar un sms (cuando nadie los había inventado aún, estamos hablando del 33 de agosto de 1969), para avisarles que salía Led Zeppelin I y los hippies se morían de tristeza, ahora, retomando el hilo del flujo ella me dijo “varón cortés y viril” a lo que yo agregué “sensible”, ella escupió una llama que me desintegró la cara, por suerte sacó de su diminuto porta maquillaje un cincel y martillo, con mucho esmero me dejó plantada la cara de la luna cuando nadie la ve, el encuentro es el de un poeta puto y hermoso que mató el franquismo, con un colombiano lisérgico y suicida, ambos tocan mujeres dentro de mi mochila, por dentro y por fuera, en el subte se asustan porque esta se mueve y cambia de colores, ahí tienen estos hijos de putas que aman viajar como sardinas hipnotizadas, de nuevo ella, me mandó un mail y gritando con voz de Polifemo con bronquitis, me pidió algo cálido y sugerente, contactémonos alocados y amorosos, cual Sofovich hablando bien del negrito Olmedo, en fusión perfecta con Luis Almirante Brown se me hubiera ocurrido llamar a nuestro show Besame la urna, pero no, ay, ay, ay, ella es tan delicada como mi respiración en este frío invierno madrugador que se vuelve hielo antes de penetrar en tus ojos, entonces a escasos 5 centímetros quedo y decido ir por la retaguardia, haciendo saltar primero el coxis, luego la quinta y sexta, séptima (no me voy a detener en todas las vértebras) alegres como meteoritos saltan y tranquila, se te adormecen las piernas y la cintura es pura rumba me repite el suicidado colombiano en sábana de fantasma, decía, tranquila que no vas a quedar como Michetti, esto es con amor….

viernes, 26 de junio de 2009

Cuerpos de lava

La habitación permanece estática, con sus paredes de color ocre y marcos negros, pero la cama del medio se agranda a medida que todos entran y suben a ella. Hombres y mujeres ingresan sin parar, más y cada vez más, con pelos de todos colores y ropas de distintas formas. Hablan ininterrumpidamente, trato de escuchar que dicen pero todas las voces engoman en una masa etérea. Agujereo los textos para cazar oraciones y descubro frases al revés, inconexos sentidos que desmembranan en letras negras que dan vueltas como colgadas de un hilo del techo. Suben y bajan de la cama ¿Cuántos somos?

Entonces, entre todas las caras, como cuando se detiene el tiempo, una redonda, latiendo un rosado tenue que nace en sus mejillas; ella me mira, cuelga el pelo rubio por su contorno, la miro, nos miramos. Se acerca y me regala un comic de Silver Surfer. Entre toda la locura de la gente voy pasando las hojas, sin prestar atención a los globitos que tienen las letras borradas, como si la hoja estuviera mojada. Páginas adentro, aparece en la historia Nova, su pelo de fuego ocupa casi toda la hoja.

Y aquí comienza la gran aventura. Como si hubieran cumplido un tiempo, los de arriba de la cama van descendiendo y desapareciendo por la puerta del cuarto, hasta que la primera vuelve a su tamaño original y la segunda se cierra, dejándonos a ella y a mí solos por completo con la historieta. Ella y yo, vamos y venimos del comic hacia la cama y la pieza. Nuestros cuerpos por un momento son de plata y relucientes como los protagonistas de las viñetas y sin tocarnos, volamos por el espacio esquivando planetas y cometas. De nuevo en la habitación ocre y las sábanas blancas, las páginas van pasando por mi mano. Silver Surfer y Nova se salen de sus cuerpos plateados, el escenario cambia y todo es azufre y volcanes a montones que erupcionan cubriendo de rojo el cielo.

De nuevo al interior del comic y ella y yo somos cuerpos de lava y piedra derretida en constante movimiento. De rojo llameante y negro lucimos. Nuestra piel viva se mueve loca cambiando de textura pero conservando las formas de hombre y mujer. No hay estrellas a nuestro alrededor, sólo un planeta ardiendo, testigo y escenario de nuestra unión.

miércoles, 24 de junio de 2009

Carta a La Parca

Querida mía:


¿Acaso debo temerte, alejarme de tu aliento y negar tu argentino filo? Es verdad que fui educado para eso, al igual que la gran mayoría en esta occidental tierra. Pero mi deseo (primero los deseos luego los pedidos) uno entre tantos, es que sigamos bailando. Aboco plenamente confiado y con templada fe en que la Orquesta sabrá desenvolver cada melodía, al ritmo en que la pieza última nos halle en fraterno abrazo.

En nuestro camino hemos perdido toneladas de sangre, pero, divina mía ¡que excitante es! Acaso quien deseche la oportunidad de husmear tus intenciones, se escude en un caparazón de marfil y eluda los disfraces del clima. Recorra durante largos años el desierto quizás indemne a tus caricias por la espalda, pero también, creo, cometerá el peor de los suicidios: no sentir absolutamente nada.

A veces pienso en los grandes Maestros, el vikingo Bergman y su lúdica obsesión de desafiarte al ajedrez una y otra vez. O el metamórfico Lorca, con sus lluvias azules y canto al enterramiento con la guitarra. ¿Qué buscaban en tu nombre que saltaron los paredones de la ortodoxia? ¿Cómo tantas otras almas sensibles, aspiraban a develar tu secreto o llenar con lamparitas de soles este tintero angustioso?

Puntual entre las puntuales, quiero enterarte que no reniego de tus compases. Acaso los furtivos encuentros que hemos mantenido, alejados de la relación cazador-presa, me han llevado a comprender tu arte. El ser barro de tus esculturas me pone feliz. La idea de la eternidad en esta obra me produce un escozor que brota de llagas mi cuerpo. Y como tú bien sabes, la materia se descompone y huele muy mal.

Párrafos arriba hice mención a los deseos. Pues bueno, que entre tantos que tengo, aspiro a que me des el suficiente terreno como para practicarlos con este corazón y ropaje. Asumo también que muchos quedarán fuera de mi partitura, pues bien tú sabes que una melodía cantada lleva a otra deseada y así, al ritmo de Eros. Deseo infinito, tiempo finito.

Estas líneas que te escribo son un intento de alejar esta oximorona relación que mantenemos. Aunque pensándolo bien, es contradictoria desde mi costa nada más. Pero sacarme de encima la repulsión hacia el embarque que me preparas, alivia mi montura y libera mi poesía.

Angel mío, la lista de pedidos es corta pero intensa. Lo más acuciante de todo es que no me duelas. Y me refiero un Alzheimer o un cáncer que escurren el cuerpo en sangre y bilis. Te pido seas dulce y al despegarme de los huesos, lo hagas con amor. Pensé tal vez, todo se dé en el campo de batalla y mi última actuación sea heroica, como la de los titanes que ilustraron las viñetas de mi infancia. Y así, como una Valquiria me lleves de la mano al Valhalla.

El segundo pedido, continuando en la senda del guerrero (pues sí, asumo mi rol de bardo armado), me obsequies las décadas necesarias para ver caer a unos cuantos de mis enemigos. Esos neoliberales que alimentan con vidrio molido el estómago de los que ansiamos la Gran Hermandad.

A modo de epílogo, recalco que me es imposible negar curiosidad al respecto de los paisajes que ocultas. O preguntarte para quien realizas esta actividad. Pero sabe bien, acepto tu rondar diario en mis jardines. Es justo que te preguntes la raíz de esta misiva, pues bien, además de la búsqueda constante y el intento de comprensión de mí existir, este acercamiento fulgura en el sentir del onírico André Bretón: “Y, sin embargo, vivo y he descubierto que tengo amor a la vida”.

Afectuosamente.

Yo.-


domingo, 21 de junio de 2009

Prisión



Antaño castigué mi nombre
poesía del ser
crimen pasional
con sangre tapado.

La ley del cuchillo
forjó cadenas de tormenta
prismática voz prohibida
clama rebelión de libertad escondida.

Una ninfa baila
desnuda de ojos y venas
fuera del hotel onírico
Eros debe poseerla.

La noche volcánica
envuelve nuestros cuerpos
vapor y piedra quemada
corroen los cimientos.

Ayer, recubiertos de plata
hoy, de ardiente lava.
En la consciencia del sueño
nuestras fronteras batallan.

Debo matarte
para volver a nacer
tu amor de carcelaria amazona
caerá del pedestal al amanecer.

A ella quiero
la de carne y hueso
la piel real de mi deseo
la que no esclaviza el sueño.


sábado, 13 de junio de 2009

ANGUSTIA

Una lágrima arranca

rieles azules y rojos

de las cavernas del cuerpo.

Un desierto azul

cuelga del techo.

Es el corazón vaciando

ríos de impotencia

al compás de la muerte

en carruaje amarillo.

El verde semilla

yace aún

en el cementerio.

Pura impotencia

encerrada en palabras.

Entre las costillas

un péndulo filoso

fabrica astillas.

No hay dolor

sólo prisión.

Es el animal

encerrado en el balcón

vigilando al límite del rencor.

Late obsesionado

escarbando libertad.

¿Hay tierra firme

o todo es mar?

Son las manos contraídas

con lo que hoy puede contar.

miércoles, 10 de junio de 2009

Me duele la realidad


"–Usted se ha pronunciado estos meses sobre los principales asuntos de la actualidad internacional. Ha escrito sobre la crisis económica y la victoria de Barack Obama. ¿Cómo ha cambiado el mundo en este tiempo?

–Hemos asistido a la caída de un capitalismo que parecía omnipotente y para la eternidad, de un mercado supuestamente regulador y distribuidor de beneficios y de democracia. Lo
malo es que la izquierda no ha tenido ningún papel en todo esto. En este momento el capitalismo está tratando de salvar los muebles y algo más, y lo va a conseguir. Mientras, la izquierda no hace nada más que digerir su derrota histórica".

La jugosa entrevista AQUI.

jueves, 4 de junio de 2009

Petit Hotel

Detrás de un vidrio o un acrílico transparente soy testigo. No se qué hay atrás mío. Adelante, a lo largo, un pasillo de maderas viejas alberga dos habitaciones. En la de enfrente una mujer joven, con un gran escote arropa a un bebe. Sus brazos tatuados son enredaderas que lo envuelven. El pelo en línea carre se mueve al ritmo de la melodía que no logro escuchar. Sus labios se ondulan en mil formas, guareciendo al pequeño del peligro. Las paredes descaradas van uniformes al lugar y la puerta celeste permanece cerrada. Lo único limpio, además de ella y el pequeño, son los cuatro vidrios de la puerta.

Un zumbido me da frío, una cabalgata en forma de niebla. Cuando la bruma se disipa un cuerpo humanoide y gris se erige. Con solo verlo asumo su fétido aroma. Sus brazos como remos casi tocan el piso, ante mi asombro crece y crece de estatura. Echando espuma entre sus colmillos, con la furia de un toro a punto de salir al ruedo comienza a ir de un lado al otro del pasillo. Sus pasos vencen a la madera y ella sigue arropando entre canciones y caricias. Quiero avisarle del peligro pero es imposible. Golpeo lo que nos separa con todas mis fuerzas y nada. La bestia va esquizofrénica de izquierda a derecha, aumentando la velocidad, aumentando mi impotencia.

No puedo distinguir con claridad quien está en la habitación continua. Los vidrios esmerilados de la puerta dejan imaginarme una figura corpulenta, que parece estar vistiéndose, armándose de alguna manera. El triángulo se completa conmigo fuera.

Sin embargo el demonio del pasillo patrulla insistentemente, ella sigue sin darse cuenta y quien está detrás de los vidrios esmerilados sigue pasivo. La desesperación me gana, inútilmente insisto con los puñetazos. Un dolor agudo me dispara en el interior del estómago y me desparramo en ese no espacio. Iluminado por la escena del hotel, me retuerzo con espasmos en todo el cuerpo. Lentamente azulejos sucios y celestes dan lugar a una habitación. Una bañera, un bidet, un inodoro, todos blancos debajo del hollín; brotan del piso. Del techo cuelga una lamparita encendida y silenciosa. Mi cuerpo está recubierto por una cota de mallas. En una esquina, una espada a dos manos envainada reposa. Huelo la muerte detrás de los vidrios esmerilados. Oigo los pasos como tambores sedientos de sangre, desafiando, aguardando. El corazón me salta del pecho. Me hinco ante el lavabo, junto mis manos y apoyo mi cabeza en ellas. Oro a los dioses para que me den fuerzas y guíen, antes de salir al pasillo.

martes, 2 de junio de 2009

El funeral del niño

-Hace mucho tiempo-

Nacido en la chispa
de la Creación
comprimido en piel humana
dedicado a la exploración

Una pluma escapista
que Dios sopló
negado a creer en la nada
huésped del suburbio existencial

No comprende
que hace allí
deseando esperanzado
un mañana después de la muerte


-El progreso-

La batalla de la Modernidad
lo parió de nuevo
esculpido como un personaje
de la conspiración divina

En las calles de plomo
el Jaguar y la Paloma
libran el combate
los silenciará la gran bomba

Hipnotizado observa
cadáveres de televisores
hijos de la red de redes
vomitando Prometeos en serie


-El asesinato-

Mar afuera
árboles en la acera
¿Cómo fue que mutilamos
a la Madre Tierra?


-El sueño-

El vidrio se vuelve dorado
traspasando el túnel
las paredes son cuchillas
iluminadas de actuaciones pasadas

Un rasguido indoloro
multiplica en infinito
desarmando en arena
la carrocería del Mundo


-Presente-

Los bustos de mármol negro
nos roban la suprema prueba
de saber vivir
para saber morir.

lunes, 1 de junio de 2009

La Valkiria y el Vámpiro

Ella es un ángel de Odín.

Él está muerto.

Ella lleva las almas guerreras
a entrenar al Valhalla.

Él los mata
para poder sentirla.

Ella no puede
quebrar su maldición.

Él no puede
convertirla en criatura de la noche.

La batalla es
el teatro de los enamorados.

La muerte vive
cuando hacen el amor.


DA.....DA.....DA....DA....DA....DA....



Yo proclamo la oposición de todas las facultades

cósmicas a tal blenorragia de pútrido sol salido de

las fabricas del pensamiento filosófico, y proclamo

la lucha encarnizada con todos los medios del Asco

dadaísta Toda forma de asco susceptible de convertirse

en negación de la familia es Dada; la protesta

a puñetazos de todo el ser entregado a una acción

destructiva es Dada; el conocimiento de todos los

medios hasta hoy rechazados por el pudor sexual,

por el compromiso demasiado cómodo y por la cortesía

es Dada; la abolición de la lógica, la danza de

los impotentes de la creación es Dada; la abolición

de la lógica, la danza de los impotentes de la creación

es Dada; la abolición de toda jerarquía y de

toda ecuación social de valores establecida entre

los siervos que se hallan entre nosotros los siervos

es Dada; todo objeto, todos los objetos, los sentimientos

y las oscuridades, las apariciones y el choque

preciso de las líneas paralelas son medios de

lucha Dada; abolición de la memoria: Dada; abolición

del futuro: Dada; confianza indiscutible en

todo dios producto inmediato de la espontaneidad:

Dada; salto elegante y sin prejuicios de una armonía

a otra esfera; trayectoria de una palabra lanzada

como un disco, grito sonoro; respeto de todas las

individualidades en la momentánea locura de cada

uno de sus sentimientos, serios o temerosos, tímidos

o ardientes, vigorosos, decididos, entusiastas;

despojar la propia iglesia de todo accesorio inútil y

pesado; escupir como una cascada luminosa el pensamiento

descortés o amoroso, o bien, complaciéndose

en ello, mimarlo con la misma identidad, lo

que es lo mismo, en un matorral puro de insectos

para una noble sangre, dorado por los cuerpos de

los arcángeles y por su alma. Libertad: DADA,

DADA, DADA, aullido de colores encrespados, encuentro

de todos los contrarios y de todas las contradicciones,

de todo motivo grotesco, de toda incoherencia:

LA VIDA.


Manifiesto Dadaísta (1918) por Tristán Tzara