sábado, 23 de febrero de 2013

Compasión



Con su ojo derretido me mira,
susurra...
Un quejido o lamento
no logro distinguir
sin sangre alrededor
no pienso en heridas.

Sólo mira
y su ojo sigue en bajada,
nadie ayuda
voceas conocidas opinan sobre curas
mas ninguna se materializa,
puro palabrerío de rezos y plegarias,
ojalá algún ángel, dios o demonio se apiade.
Ojalá una luz
llene ese cuenco.