domingo, 30 de noviembre de 2008

MACRI Y OTRO ATAQUE VAMPIRO A LA EDUCACION

El Gobierno de la Ciudad está a punto de cerrar la histórica Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano, situada en la Boca. Pretende utilizarla como sede de un nuevo instituto que llama ISMA el cual fue inaugurado con la promesa de brindar educación artística pero carece de edificio, de título y de todo.
Por lo tanto, siguiendo con la política del Gobierno y tomando su ejemplo, los alumnos de la escuela van a disponer de los espacios públicos como quieran y cuando quieran.
El primer proyecto es el llamado Proyecto Fuentes y va a tener lugar en:

Av. Cordoba y 9 de julio , el jueves 4 de diciembre a las 12 horas puntual.

La idea es que participen todos los que quieran y puedan, sean o no estudiantes llevando hasta allá sus cosas de playa, bikinis, sombrillas y todo lo que quieran.
Los creativos artistas que están luchando por no perder su lugar, van a poner espuma en la fuente del lugar, por lo que van a necesitar de donaciones: detergente o jabón en polvo. La idea es armar un día de verano y permanecer en el lugar el mayor tiempo posible. Por lo tanto, cuanta más gente mejor.
Más información en www.labelgranobellasartes.blogspot.com









viernes, 28 de noviembre de 2008

Atado a tu frontera



En la inconsolable noche tu voz,

aullando me guía,

yo solo estoy atado a tu frontera...

algo se acumula en mí,

lo siento, ya no tengo remedio...

yo solo estoy atado a tu frontera...

¿Por qué tu corazón brilló sin parar

y luego se detuvo allí?

¿Por qué las estrellas giran,

brillan y luego explotan?

Tus ojos son lunas, dos lunas,

dos lunas que envuelven mi alma...

yo solo estoy atado a tu frontera...

Amor, ya no temo morir,

solo espero que Dios tenga tu gracia,

yo siempre estoy atado a tu frontera...

¿Y cómo derivó en hielo el amor?

¿Y cómo ya no quieres volar?

¿Cómo es qué prefieres quedarte dormida,

en un mundo muerto?

Y es que vas a saber por fin...

como evolucionó,

tu sociedad,

tu bien,

tu pompa...

Vas a mirar,

por fin,

como se capacitó,

tu corazón

creador de páramos...

Mi luz no existe, no existe, no existe...

porque estuvo corriendo,

siempre alrededor de tu frontera...

Si acaso las nubes violetas,

se escapan formando mis huesos ...

será que estoy atado a tu frontera...

¿Por qué tu corazón brilló sin parar,

luego se detuvo al fin?

¿Por qué las estrellas giran,

brillan y luego explotan?

Y es que vas a saber por fin,

como se desmoronó...

tu condición,

de ser,

impecable,

Vas a saber por fin...

como se constituyó,

tu corazón,

creador,

de páramos...

¿Y cómo es que no quieres ver

a los hombres en su lucha cruel,

y además contener la ira del mar?

¿Cuando entenderás

que así respira tu ambición tan loca?

Y es que vas a saber por fin,

como evolucionó,

tu sociedad,

tu bien, tu pompa...

Vas a mirar por fin,

como se capacitó

tu corazón,

creador de páramos...

Y vas a saber por fin,

como evolucionó tu corazón...

y es que vas saber por fin,

como se capacitó,

tu corazón creador de páramos...

Vas a salir a ver tu bolita de cristal,

y así pulir y redondear tu idea...

martes, 25 de noviembre de 2008

LA TRASCENDENCIA EN LA ANTROPOFANIA

EL LADO OSCURO DE LA LUNA


Este trabajo intentará entablar un puente entre el filósofo alemán Johann Cristoph Friedrich Schiller y el escritor argentino Julio Cortázar. A partir de los textos del poeta y filósofo teutón La educación estética, el ensayo del Licenciado en filosofía Estaban Ierardo El agua y el trueno. Ensayos sobre arte, naturaleza y filosofía; pretendo allanar ideas tales como belleza, juego y libertad en algunas de las obras de Cortázar como la novela Rayuela, el cuento Silvia, el diario de viaje Los autonautas de la cosmopista y las Historias de cronopios y de famas. También utilizaré la exposición de Esteban Ierardo sobre Julio Cortázar brindada en el año 2004 en el marco de las Jornadas sobre literatura de Cortázar, organizada por la revista El perseguidor titulada Cortázar y la salida a lo abierto. Por otra parte haré uso del saber y vivir trágico.

Una primera hipótesis puede ser ver como en las creaciones artísticas del narrador argentino, a través de los conceptos de Schiller como belleza, el juego y la libertad, podemos indagar en la fragmentación del hombre moderno tanto en lo social como en lo emocional. Otra hipótesis cuya comprobación intentaré dejar abierta, a fin de utilizar la misma como una herramienta para la búsqueda de una restauración de la esencia humana y su universalidad en un fluido y equilibrado ritmo, es precisamente que Cortázar ejecuta esta exploración en sus obras, las que a su vez se convierten en armas para ensayar una restauración del hombre en forma de unidad y armonía con “…la gran fuerza misteriosa. Que ahora se oculta. Pero que aún respira en el viento”.[1]




EL LUNATICO ESTA EN MI CABEZA


“—A
quí nos quedamos los más viejos —dijo Raúl. (Entonces Graciela se quedaba pero Silvia era los cuatro, Silvia era cuando estaban los cuatro y yo sabía que jamás volverían a encontrarse)”.[2]

El hombre moderno, bujía fundamental de nuestra sociedad capitalista, vive con sus instintos reprimidos. Así el hombre niega su espontaneidad, su ritmo creativo que lo conduce a transitar la angustia existencial. Las agujas del reloj biológico nos marcan el límite del cuerpo, pero como seres incompletos que somos con imperecedera sed de desear y desear, chocamos contra ese “pequeño infierno florido, una cadena de rosas, un calabozo de aire”.[3] Dando nacimiento a esa angustia con la que debemos convivir hasta el último de nuestros días. La opresión ejercida por el sistema capitalista denigra en plusvalía y alienación al hombre, negándole el espíritu lúdico y poder creativo.

En esta sociedad capitalista nuestra angustia existencial es engañada por el mercado y sus sirenas del consumo, con incontables productos artificiales que tapan momentáneamente nuestro padecimiento. La ciencia, otro colaborador de este ocultamiento, sistematiza hace ya varios siglos los fenómenos naturales. Los pensamientos de la ciencia convierten al hombre en ciervo de la razón, sometiéndolo al imperio del entendimiento. No hay aquí belleza como el pensamiento kantiano la definió, como una ley sin ley que es transmitida a través de los juicios estéticos.

Retomando y reformulando conceptos de Kant, Schiller afirma que la intuición es la percepción sensible de algo como unidad, el entendimiento mata esa unidad porque la sustituye con pensamientos. Sostendrá también el filósofo alemán que la realidad primero es vital, luego intelectual. Así, para él, “el hombre moderno se desangra en las múltiples heridas de la fragmentación”.[4] Esta fragmentación se produce gracias a la acción de la racionalidad como entendimiento, como herramienta de comprensión y análisis, y todo análisis es un dividir en parte el objeto, lo que determina un gran debilitamiento.

Contrario a este accionar, a este sentir y vivir es que Cortázar se manifiesta en por ejemplo, el cuento Silvia. Allí la simple unión de cuatro niños de 7 años, en juegos de indios y vaqueros o en el remontamiento de un barrilete, da vida a una supuesta amiga invisible. A la que sólo perciben ellos. Silvia únicamente habla y juega con los niños, quienes por su parte le han contado a sus padres de su nueva amiga, pero estos no les creen, les dicen que la inventaron y que ya los tienen aturdidos con eso. Por lo que los pequeños desisten de compartir a su nueva amiga con los adultos. Salvo con el narrador del relato, quien nunca dice su nombre pero al estar este narrado en primera persona se deduce que es el mismo Cortázar. Quien supera esa oposición entre pensamiento y percepción sensible, se libera del entendimiento racional accediendo a una realidad que no es dada y establecida sobre el sujeto, sino que es una realidad estética aflorada en la relación y accionar lúdico que Cortázar entabla con los niños. En esta relación de juego con los niños, el protagonista del cuento escapa a la materia, a lo real que nos es dado, alcanzando una armoniosa unidad conformada por el razonamiento y la percepción sensible.

Esta creación artística de Cortázar, es una espada atacando fuertemente la represión del hombre moderno. Un espíritu lúdico de este tenor, se convierte en vehículo catártico que permite recorrer el camino junto a la angustia existencial. Esta actitud trágica es equiparable al instinto del juego de Schiller, instinto alimentado por el impulso estético que guía al hombre hacia “un tercer reino, un reino alegre de juego y de apariencia, donde el hombre se despoja de los lazos que por doquier le tienen sujeto y se libera de todo cuanto es coacción, tanto en lo físico como en lo moral”. [5]

Precisamente Schilller habla de la construcción de un estado moral. Un estado que no existe en el tiempo, que es una idea. Este estado moral se construye por la independencia estética del hombre, en la que el juicio estético comprendido como una finalidad sin fin cognoscitivo y sin buscar algo instrumental, nos lleve a una belleza libre de la racionalidad y la utilitariedad. Y belleza refiere aquí a una libertad de lo interior, en pos de la recuperación de la genuina humanidad fragmentada y reprimida.

Continuando con el relato de Silvia, se ve como los padres de los niños no les prestan ningún tipo de atención, cuando ellos les quieren mostrar a su nueva amiga. Los padres representan allí el aullido del hombre en la disociación, en la fragmentación de su espíritu lúdico que les permitiría ir en búsqueda de otra realidad. Estos adultos están subordinados a una ley moral que les dicta, que ellos son precisamente adultos y por ser así, reprimen una libertad artística que les permita desarrollar la espontánea creación.

Los autonautas de la cosomopista o Un viaje atemporal París-Marsella, no sólo es uno de los libros de viajes más extraordinarios, sino que todo lo que allí se relata ocurrió tal cual. En dicho libro Julio Cortázar y su mujer Carol Dunlop, recorren durante treinta y tres días la autopista que va de París a Marsella, como si fueran expedicionarios que viajan por tierras extrañas y mágicas. Durante el tiempo de viaje, van parando dos veces por días en los sesenta y cinco paraderos que hay a los costados de la autopista, sin salir jamás de la misma. La bitácora comienza con una carta que Cortázar le envió al Director de la Sociedad de las Autopistas, en la que exponen lo siguiente:

“Tal es nuestro plan, que se llevaría a cabo con el apoyo de algunos amigos encargados de reabastecernos cada diez días (aparte de lo que encontraremos en los paraderos de la autopista). El único problema está en que, según creemos saber, un vehículo no puede permanecer más de dos días en la autopista, y por esa razón nos dirigimos a usted para pedirle la autorización que, llegado el momento, nos evitaría tener dificultades en los diferentes peajes”.

A continuación de la misiva pidiendo autorización, Cortázar la no respuesta obtenida:

“Esta carta fue enviada el 9 de mayo de 1982. El día 23 luego de abrir infructuosamente y por última vez nuestro buzón, entendimos que dos semanas habían bastado de sobra para que una sociedad comercial, por más plagada que esté de computadoras y de secretarias biliosas, respondiera a nuestra modesta petición”.

Tanto en el diario de viaje como en su publicación en formato literario, poético y humorístico, Cortázar reconcilia los opuestos de la libertad interior y la ley exterior puramente formal del hombre moderno. “El hombre es un conjunto de fragmentos, ya no es unidad. Y cuando se rompe la unidad lo único que queda es el conjunto de agónicos escombros, de fragmentos que no pueden ser superados. La realidad fragmentada, sin superación, es la que se hunde en su propia agonía”.(6)

Con este viaje, con este ponerse a jugar con y en la autopista, el escritor argentino reconcilia esos opuestos, logra la reunión de los escombros fragmentados. El espíritu lúdico es nuevamente aquí, belleza y libertad, con la recreación para superar los opuestos y poder recuperar el poder de la creación para rehacerse a si mismo. Como se autodenominan Cortázar y su compañera es un buen ejemplo de esto: Lobo y Osita. Ya en los nombres está la raíz para el accionar lúdico y en este caso, autobautizarse a si mismos y dejar de lado los nombres que les fueron puestos por otros desde afuera. Incluso la van Volskwagen en la que realizan la expedición recibe el nombre Fafner, que según Cortázar eligieron este mote por:

“Lo del dragón viene de una antigua necesidad: casi nunca he aceptado el nombre-etiqueta de las cosas y creo que eso se refleja en mis libros, no veo por qué hay que tolerar invariablemente lo que nos viene de antes y de fuera, y así a los seres que amé y amo les fui poniendo nombres que nacían de un encuentro, de un contacto entre claves secretas, y entonces mujeres fueron flores, fueron pájaros, fueron animalitos del bosque, y hubo amigos con nombres que incluso cambiaban después de cumplido el ciclo, el oso podía volverse mono, como alguien de ojos claros fue una nube y después una gacela y una noche se volvió mandrágora, peor para volver al dragón diré que hace dos años lo vi llegar pro primera vez subiendo la rue Cambronne en París, lo traína fresquito de un garage y cuando me enfrentó la vi la gran cara roja, los ojos bajos y encendidos, un aire entre retobado y entrador, fue un simple clic metal y ya era el dragón y no solamente un dragón cualquiera sino Fafner, el guardián del tesoro de los Nibelungos, que según la leyenda y Wagner habrá sido tonto y perverso, pero que siempre me inspiró una simpatía secreta aunque más no fuera por estar condenado a morir a manos de Sigfrido y esas cosas yo no se las perdono a los héroes, como hace treinta años no le perdoné a Teseo que matara al Minotauro”.[7]

Nuevamente hay aquí un camino hacia la unidad, hacia lo profundo del ser dejando atrás los rótulos impuestos desde el exterior por otros, clausurando los sistemas rígidos y proyectándose en un ser más amplio. Esto no sólo es remitible a experiencias personales como las que Cortázar relata en el párrafo anteriormente expuesto, sino también a nivel social a lo largo de todo el libro. Cortázar tiene la suficiente creatividad y libertad imaginativa para experimentar la creación de un nuevo hombre en algo tan característico de la sociedad moderna como es una autopista. Una cinta de asfalto de cientos y cientos de kilómetros, donde todos los días miles y miles de autos con pasajeros que se desconocen entre sí, se pasan unos a otros. La autopista representa aquí una certera metáfora de la más nítida fragmentación, que es el hombre en la actualidad. Esta es la recreación de un hombre nuevo, el que se le anima a pelearle a la autopista, el que se le anima a explorarla como si fuera un valle encantado habitado por demonios y duendes, que a su vez va a lo largo de toda su épica aventura haciendo nuevos amigos y reencontrándose con los de antaño, quienes colaboran con la provisión de bebidas y alimentos.

Esta exploración de la autopista es también la unión de los amigos, que reaccionan en conjunto sin avizorar ningún horizonte utilitario, simplemente lo hacen por el hecho de jugar, de convertirse en libertad lúdica. Pero para llegar a este punto, a la instancia de primero imaginar y luego ejecutar tal viaje aventurero, Cortázar apeló a su inteligencia artística, a su libertad creativa, esa que exige la transformación paralela de la sociedad y de la cultura. Es mediante la imaginación que el hombre se reconcilia con sus posibilidades creadoras más primarias.

“Por lo tanto, la imaginación no es una culpable ensoñación pequeño burqguesa, sino que, tal vez, sea la forma más valiente de asumir la posibilidad de una reconstrucción antropológica. En e imaginar no hay escapismo, todo lo contrario. El hombre es sus circunstancias. Sí. Pero también es su creadora potencialidad inconsciente”.[8]

Para Schiller “La belleza es, pues, para nosotros, un objeto, porque la reflexión es la condición bajo la cual tenemos una sensación de ella; pero al mismo tiempo es un estado de nuestro sujeto, porque el sentimiento es la condición bajo la cual tenemos representación de ella. Es, pues, forma, porque la contemplamos; pero al mismo tiempo es vida porque la sentimos. En una palabra: es a la vez un estado nuestro y un acto nuestro”.

Este estado de belleza es el que propone Julio Cortázar en su novela Rayuela. Como el mismo autor dice en el Tablero de dirección “este libro es muchos libros, pero sobre todo es dos libros. El lector queda invitado a elegir una de las dos posibilidades siguientes:…”. Nuevamente surge aquí la fragmentación humana y un acercamiento a la naturaleza que todo lo une, para integrarse con el lector de forma armoniosa. Cortázar propone un juego en una separación pero al mismo tiempo reclama al lector una unión, precisamente a través de esa acción lúdica que el lector deberá sentir para luego practicarla mediante la creación espontánea.

El lector al tener que elegir entre leer de forma corriente Rayuela y concluirla en el capítulo 56 (cuando el libro consta de 155 episodios) o comenzar leyendo por el capítulo 73 para luego seguir el orden que el autor le presenta, penetra así en la libertad artística que le está proponiendo Cortázar. Le está dando a tener que optar por una forma clásica, rígida de manejarse dentro de un libro o, por una libremente imaginada, abierta a una amplitud que entre otras cosas, puede sacarlo de la aprisionante mecánica temporal del reloj para penetrar en el constante presente que es el tiempo del inconsciente, y acceder a una potencialidad creadora sin fin. Con esta bifurcación de senderos que realiza Cortázar, le brinda al lector no solamente la posibilidad de contemplar la belleza, sino que le pide también actividad, acción lúdica; le da la opción de sentir esa belleza, de ser parte y forma de esa belleza, de actuar en forma libre y bella. Además, el hecho de presentar esta forma de leer de una novela, en contraposición con la clásica manera lineal, puede ser tomada como una metáfora de que siempre hay otra realidad, además de la que se nos presenta desde lo externo. “La ciencia pretende excluir aquello que no ingresa al enunciado, al concepto. En cambio, la metáfora artística brota desde una realizad libre de los límites de la lógica”.[9]

De hecho Cortázar no propone descartar una u otra forma de lectura, invita a leer una y otra, a unir esos opuestos en una sola unidad. Pero unidad que al fin y al cabo debe crear artística y libremente el lector, debe ejecutar una actitud activa en la que viva una antropofanía:

“Antropofanía para mí, significa la aparición del hombre, pero justamente de ese hombre ideal que yo veo, que yo deseo, que es mi ideal en mi proyecto de humanidad; es decir, cuando yo hablo de una antropofanía, me refiero a ese momento en que el hombre haya podido superar las limitaciones que lo ponen por el momento más acá de lo que verdaderamente él podría ser, y llegue a ser, lo que puede un hombre en el momento en que dé el máximo de sus posibilidades, ese día se descubrirá a sí mismo, se verá aparecer a sí mismo, habrá una antropofanía; esa noción del hombre nuevo que tanto se ha manejado en el vocabulario de la revolución en América Latina contiene esa expresión, sólo que mi expresión es muy pedante porque busca las raíces griegas, y el hombre nuevo es en cambio la misma cosa; es decir, esa noción del hombre liberado de todos los tabúes, de los prejuicios, de los odios, de las limitaciones en que históricamente se mueve hoy mientras estamos hablando. El hombre que haya dejado todo eso atrás, se verá a sí mismo como la realización de lo que hoy no es más que un proyecto. Entonces sí, será la antropofanía, la aparición del hombre sobre el planeta”.[10]

En el cuento Usted se tendió a tu lado Cortázar expone nuevamente la libertad lúdica en pos de la unión con el otro. Como si este relato fuera otra batalla más de la gran guerra de Cortázar contra la fragmentación del ser humano, nuevamente aquí el otro es el lector, el que debe escapar a la represión de sus instintos y dejar fluir su libertad creativa e imaginativa para descubrirse a si mismo.

“Pero te volvió la espalda y se tapó la cara con el sombrero de paja. El íncubo, el insomnio, la vieja Delcasse, era para reírse. El filo del límite ¿qué filo, qué límite? Todavía era posible que uno de esos días la puerta de baño no estuviera cerrada con llave y que usted entrara y te sorprendiera desnudo y enjabonado y de golpe confuso. O al revés, que vos te quedaras mirándola desde la puerta cuando usted saliera de la ducha, como tantos años se habían mirado y jugado mientras se secaban y se vestían. ¿Cuál era el límite, cuál era realmente el límite?”.[11]


ECLIPSE


Al comienzo del trabajo se expuso el interés de entablar un puente entre Schiller y Cortázar. Se intentó edificar una unión a partir del espíritu lúdico del filósofo alemán, que llegue directamente a la libertad cortazariana. La belleza percibida aquí como una ley sin ley, es otra de los puntos que se intentó allanar en las obras de Cortázar expuestas. La ley de la belleza que es trasmitida mediante los juicios estéticos, para lograr la independencia estética y así alcanzar un estado moral opuesto al de nuestra sociedad capitalista moderna.

Se planteó también la fragmentación del humano causada por la represión sobre los instintos, que la forma de organización capitalista ejecuta; sobre como la apertura a una amplitud liberadora que deje atrás los sistemas rígidos es posible a través de la inteligencia artística. La cual se manifiesta en libertad lúdica y creación espontánea. En las creaciones artísticas del escritor argentino mostradas, se pudo observar la incesante búsqueda de otra realidad y de un hombre nuevo. Del recorrido de un viaje interior a través de la unión de dos opuestos como la percepción sensible y el pensamiento racional, para alcanzar una fluidez de unidad total.

Aunque lo que se pretende dejar abierto con este trabajo, es una ambición de Cortázar que también puede hallarse en todas las obras expuestas. El artista habla en el reportaje mencionado, de la aparición de un hombre nuevo que se libere de los tabúes, de las limitaciones, de los prejuicios y de los odios. Habla de la aparición de un nuevo hombre sobre el planeta, cuando este se descubra a sí mismo y surja la antropofanía. Pero para llegar a ese estado el hombre debe dejar atrás todo los límites, odios y prejuicios que señaló Cortázar. Y según se puede evaluar desde lo trabajado hasta aquí mediante los conceptos de belleza, juego y libertad de Schiller; para Cortázar la forma de atravesar los límites es mediante la creación artística. Una conmoción catártica que le permita al hombre moderno drenar su alienación y represión.

Quizás la constante invitación a participar, a unirse en la espontaneidad lúdica y creativa que Cortázar le hace al lector, pretenda ser un intento de comunión colectiva para alcanzar una armonía y fluidez humana, con la fuerza misteriosa que aún respira en el viento. Quizás en la antropofanía esté la trascendencia para fundirse con la fuerza misteriosa.



[1] Ierardo, Esteban en El agua y el trueno. Ensayos sobre arte, naturaleza y filosofía. Prometeo, 2007.

[2] Cortázar, Julio en Silvia en Último round. Punto de lectura, 2004.

[3] Cortázar, Julio en Preámbulo a las instrucciones para dar cuerda al reloj, de Historias de cronopios y de famas. Punto de lectura, 2004.

[4] Ierardo, Esteban en El agua y el trueno. Ensayos sobre arte, naturaleza y filosofía. Prometeo, 2007.

[5] Schiller, Johann Cristoph Freidrich, en Cartas sobre la educación estética.

[6] Ierardo, Esteban en Cortázar y la salida a lo abierto, conferencia publicada en Revista El perseguidor, 2004.

[7] Dunlop – Cortázar en Los autonautas de la cosmopista. Alfaguara, 2007.

[8] Ierardo, Esteban en Cortázar y la salida a lo abierto, conferencia publicada en Revista El perseguidor, 2004.

[9] Ierardo, Esteban en Cortázar y la salida a lo abierto, conferencia publicada en Revista El perseguidor, 2004.

[10] http://www.taringa.net/posts/arte/1278416/De-una-conversaci%C3%B3n-con-Julio-Cort%C3%A1zar:-_Equot;Yo-creo-que.html

[11] Cortázar, Julio en Usted se tendió a tu lado de Alguien que anda por ahí. Punto de lectura, 2004.


lunes, 24 de noviembre de 2008

Camino a mi funeral

A ella,
que hoy es estrella


Todas las mañanas
me levanto y camino
hacia mi funeral
no es un diablo el juez
sólo mis ganas de continuar

Miro al sol y agradezco
la luz de la Fuerza Misteriosa

En pasos negros
a ojos de algunos
voy drenando angustia
entre el calabozo de aire
y mis deseos diarios

En constante formación vivo
incompleto me extinguiré

Algunas noches oscuras
acaricio la doble caño
palpitando su pólvora
y en el dolor más tremendo
una canción me rescata del mundo

Es el miedo a desaparecer
lo que hace al hombre perecer

Todas las mañanas
recuerdo a mi Abuela diciendo
"Martincito, lo único que no tiene solución
es la muerte
que ni siquiera es un problema"

martes, 18 de noviembre de 2008

Frase de la semana



SOY INMORTAL

(No tengo dónde caerme muerto)





El que la ideó es simplemente un genio.



THE DARK SIDE OF THE FORCE

martes, 11 de noviembre de 2008

100 OXIMORON 100





**OXIMORON**

¡¡100 programas 100!!

sábado 08/nov/2008

www.fotolog.com/soyoximoron

¡¡¡hacete oximoron!!!

Linda excusa para oírnos, vernos, reencontrarnos y sobre todo, agradecerles ser parte de este proyecto que vive y nos hace continuar cada sábado (¡A pura pila y pulmón!).

**OXIMORON**

Sábados de 20 a 22 hs

por Radio Atómika FM 106.1 mhz

www.radioatomika.com.ar


Cuando empezamos con Oximoron ni se nos cruzaba por nuestra existencia, festejar 100 programas. Tres años haciendo radio, divirtiéndonos, creando, jugando, intentando cambiar el mundo por más utópico que esto parezca. El mundo del que está detrás del parlante acompañándonos, el mundo de cada uno de los que hacemos este programa.

Y esperamos haberlo logrado, con una palabra, con una canción, con alguna idea nuestra que haya encarnado en alguno de los oyentes, algo de ellos cambió, algo hizo efecto en su ser. Ni hablar de nosotros, ni por casualidad somos los mismos que allá por el 2.005, sin conocernos, decidimos, empujados por las ganas y la curiosidad, salir al ruedo con todo a crear de la nada un programa de radio.

Hoy, un poco más experimentados, habiendo quedado sólo nosotros cuatro, miramos atrás y seguimos sin creer lo que atravesamos. Amigos, vivencias hermosas y dolorosas, noches oximoronas que formaron lo que hoy reflejamos.

Sin embargo, siempre están aquellos que preguntan “¿para qué siguen haciendo radio? ¿Es un hobby? ¿A quien le hablan?” Seguimos haciendo radio porque amamos este medio y lo que uno ama, no debe dejarse nunca. No es un hobby, es nuestra forma de respirar en la sociedad. Le hablamos al mundo, a quien nos quiera escuchar, a ése que cree fervientemente en la esperanza de seguir adelante, de querer ser como uno tiene ganas sin dejarse abatir frente a toda esa mierda que vemos y sentimos día a día.

Y en este festejo también necesitamos agradecer a todos los que están o estuvieron con el programa sumando sus voluntades para que lleguemos a este momento, que sin haber sido soñado, es gratificante y placentero. Hablando de voluntades, José Saramago en Memorial del convento escribió: “el éter (…) vive dentro de los hombres y mujeres (…) pero no se compone de las almas de los muertos, se compone, oídlo bien, de las voluntades de los vivos (…) Es la voluntad de los hombres lo que sostiene a las estrellas…

Nos quedan por ahora muchas fuerzas y deseos de seguir siendo Oximoron. Apoderarnos del micrófono y ser tan contradictorios para odiar y querer al mundo, todo al mismo tiempo. Porque creemos que hay un nuevo sentido, el nuevo sentido de todas nuestras contradicciones.

Azu*. Emi*. Pablo*. Yoli*.

domingo, 9 de noviembre de 2008

A veces...

A veces pienso todo
y no siento nada.
A veces no pienso
y siento demasiado.
A veces quiero cojerte
y robarle a quien menos me gusta.
A veces me pregunto
¿qué son las malas palabras?
A veces quiero volverme loco
y gritar en el subte "¡Soy el Emperador de Gelatinalandia!"
A veces quiero amoratar el cielo
y devolverle las tormentas.
A veces quiero ver detrás del Sol
simplemente por curiosidad.
A veces intento robarle la fe a Dios
para sembrar un nuevo inicio.
A veces quiero tocarme el alma
y rasparle sus miedos.
A veces me quiero un poquito más
y juego a ser Paracelso.
A veces mi inconsciente es un Fórmula 1
y termino volcado en la banquina.
A veces soy injusto con mi Estrella Guía
y ella ríe amorosamente.
A veces renazco cada día
a veces quisiera que fuera siempre.

sábado, 1 de noviembre de 2008

La mujer de verde

La mujer de verde
con sus oraciones de color
por su vía llena de ojos
desnuda en su andar

En su elixir de vida
savia de la primera naturaleza
orgullosa para volver atrás
tan sólo quiere paz

Ella sólo cede
a los rayos tentáculos
de su amor con los dedos
por pintura manchados

Escapan al tiempo
armonizando el espacio
la creación anclará allí
cuando su hijo llore al fin

Y todo fue un sueño
al final de la noche
cuando la pintura terminó
la mujer de verde murió